ciaAlan Lomax (1915-2002) está considerado como uno de los más grandes folkloristas de la historia, así como un gran recopilador de canciones populares de todos los tiempos. Comenzó su trayectoria junto a su padre, también etnomusicólogo, registrando los antiguos cantos de los esclavos negros de Luisiana, Texas y Misisipi. El resto de su vida la consagró a recorrer el mundo.
El experto visitó España, a pesar de la oposición del régimen franquista, porque la BBC le encargó que cubriera un festival de folklore en Mallorca. Fue en junio de 1952. Cuando descubrió el espléndido catálogo musical español, decidió alargar su estancia hasta superar los seis meses, siempre bajo la atenta mirada de la Guardia Civil. Fue entonces cuando recaló en Murcia y visitó Sangonera la Verde y Monteagudo, la primera para conocer los cantos de aguilando y por la fama de su cuadrilla. La segunda, por el prestigio de sus auroros.
Fotografías inéditas
En ambas pedanías Lomax grabó diferentes malagueñas y parrandas, además de salves de pasión, de difuntos, de San Antonio y San Juan, sin olvidar la estrella de los registros sonoros murcianos: las correlativas. Entretanto, su colección se enriqueció con instantáneas de ambas localidades, hoy auténticos tesoros para el estudio del folklore en Murcia.
Lomax llegó a Sangonera la Verde el 15 de diciembre, un día después de visitar Monteagudo, donde conoció al célebre tío Juan Pedro, quien durante décadas impulsó el conocimiento del cántico de los auroros. Junto a la suya, en las cintas se escuchan nítidas las voces de los hermanos Castejón, Juan Valverde o Camilo Nicolás.
En Sangonera reunió a un nutrido grupo de músicos ligados desde antiguo a los mayordomos de la patrona, Nuestra Señora de los Ángeles. El encuentro se celebró en la calle principal del pueblo, donde el etnomusicólogo realizó las grabaciones. De entre todas ellas destacó el aguilando, con un compás muy diferente -quizá más antiguo- del que habitualmente se cantaba en otros lugares de la huerta y sus pedanías.
Un curioso error
Lomax, de su puño y letra, escribió en la cinta que la pieza había sido interpretada por la “Cuadrilla de Pascuas or Mayordomía de Sangonera”, si bien en los registros posteriores se atribuyó el aguilando a los Auroros de Monteagudo. Curiosamente, la confusión se mantiene en la página electrónica que ofrece los archivos. Pero basta escuchar la letra para salir del error: «En tu puerta está la Virgen, en figura de paloma, es la Reina de los Ángeles, de Sangonera patrona». Por otro lado, en la caja del carrete original puede leerse: «Aguinaldo performed by the Rondalla in S».
El folclorista también realizó en Sangonera grabaciones que pueden considerarse como históricas por el gran valor antropológico y musical. Se trata de diversas parrandas y malagueñas interpretadas por Juana Ramírez y Ana Serrano. No menor sorpresa sintió en Monteagudo ante la belleza de las correlativas, auténticos y espléndidos fósiles sonoros de nuestra huerta.
Los herederos de Lomax decidieron hace unos años cumplir el sueño del etnomúsico de permitir el acceso público a su colección. El resultado de la catalogación permitió crear un espléndido archivo que consta de más de 5.000 horas de grabaciones. Y allí, entre las 17.000 grabaciones restauradas, entre aquellas mismas que atesora la biblioteca del Congreso de los Estados Unidos, resuenan los aguilandos de Sangonera y las correlativas de Monteagudo.